sábado, 5 de octubre de 2013

ELYSIUM * * * 1/2

CON LAS HORAS CONTADAS. Matt Damon se une al club de los héroes de acción pelones.

En Elysium (2013) Matt Damon luce como un rubio Vin Diesel versión "Riddick". Con la cabeza afeitada, moviéndose en los barrios pobres de Los Angeles (de hecho, locaciones de la Ciudad de México) y con un mecanismo atajado al cuerpo, formado por tubos y amortiguadores, Max (Damon) es una especie de crístico personaje futurista, predestinado a cumplir una misión importante en su vida. El sudáfricano Neill Blomkamp nos transporta nuevamente a uno de sus universos, en donde la ciencia ficción embona perfectamente con historias sobre futuros decadentes, como lo demostró en la impresionante y entretenida Distric 9 (2009). Sin embargo, Elysium lucha por presumir de algún destello de originalidad, con todo y contar con un efectivo reparto, así como de atractivos efectos especiales. 

A lo largo de la película, se pueden encontrar referencias a Total Recall (la escena con Max tratando de razonar con un robot burócrata), e incluso 2001: A Space Odyssey, con la idea de una mega estación espacial orbitando cerca de la Tierra. La estación, llamada Elysium, es gobernada por una tiránica secretaria de estado (Jodie Foster, estupenda como siempre), quien ha implementado leyes anti inmigrantes duras, y tomado el control de los servicios médicos, dejando a los habitantes de la Tierra en total desamparo. Es el año 2154. Elysium es una deslumbrante ciudad, idílica y paradisiaca, con lagos, áreas verdes, y cuyos habitantes gozan de cabinas capaces de curar en segundos desde fracturas hasta cáncer. Mientras, en la Tierra, la gente fronteriza vive en condiciones de miseria, tratando de emigrar ilegalmente hacia Elysium.

Elysium es un buen entretenimiento, sin muchas ambiciones, con ideas interesantes que, desafortunadamente, no son exploradas más a fondo. Visualmente, tiene su impacto. Como los extraterrestres de District 9, aquí hay unos robots que lucen extraordinariamente reales. Max es un obrero, al cual de niño una monja le auguró uno de esos destinos que cambian al mundo. Trabajando en condiciones difíciles, Max sufrirá un accidente en su trabajo, siendo expuesto a una peligrosa radiación. Condenado a morir en aproximadamente 5 días, y sin mucho que perder, nuestro héroe acepta una misión que podría acabar con los abusos del gobierno y, de paso, curarse. Eso si un mercenario (Sharlto Copley, de Distric 9) no se lo impide primero. Quizás, Blomkamp tuvo algunos problemas en equilibrar los elementos de una película de ciencia ficción inteligente y de toque independiente, y los de una más del mainstream. Lo malo, es que lo consigue a expensas de poder haberle dado más profundidad a la historia y hacerla más interesante.

No hay comentarios:

Vistas de página en total